Amigos(as) acá, transcribo la traducción que intente de la canción de Emeline Michel. Después de la traducción, les exhorto a leer los comentarios para entender un poco más de su significado.
Nan mitan yon champ kan En un campo de caña
Bo Higuey Por Higuey
En Dominicani En Dominicana
Gin dé Haitiens Hay dos haitianos
Chita nan yon batey Sentados en un batey
(Mwin Di) yo pié a te (Se lo digo) Descalzos
Yo do tou ni La espalda desnuda
Pendan youn tap palé Mientras uno hablaba
Youn tapé kouté El otro escuchaba
(Mwin di yo), yo pat fai brui ( Se lo digo) Hablaban tan bajito
Van nan kan nan seulement Que solo el viento en la caña podía
Ki tandé(bis) sa yo tapé di Escuchar lo que decían
Youn di: cousin Uno dijo: Primo
-Mwin pwal fété Haiti -Voy a festejar en Haití
-Min yon comisión -Aquí esta un encargo
Wa bay madam mwin pou mwin Lo entregaras a mi mujer de mi parte
Li di: Cousin, Cousin Dijo: Primo, Primo
Se yon “diez pesos” Son unos diez pesos
Li di Cousin, Li di Cousin… Dijo: Primo, Primo
Leu wa jambé lakay Cuando cruzaras a casa
Si ou jwin madam mwin placé Si encuentras a mi mujer con otro
Wa bay manman mwin li Los entregaras a mi madre
pou mwin de mi parte
Cousin alé, cousin tounin Primo se fue, primo volvió
Ak yon nouvel ki bay ke plin Con una noticia que destroza el corazón
Manman’m mouri (mouri) Tu madre murió, (murió)
Sa gin kek ané Hace ya algunos años
Gin moun ki di que cé chagrin Algunos dicen que fue por la tristeza
Madam nan la, li la (li la) Tu mujer esta allí, allí
Lapé kimbé Aguantando
Et ti moun yo, yo mal okipé Los niños están mal
Prémié-a grandi, li grandi El primero creció, creció
Kankou chwal Como un caballo
Et ti denié-a, pa mim Y el último, siquiera
Pa mim songé papa’l Siquiera recuerda su padre
Nan mitan yon champ kan En un campo de caña
Bo Higuey Por Higuey
En Dominicani En Dominicana
Giyin dé Haitiens Hay dos haitianos
Chita nan yon batey Sentados en un batey
yo pié a te (Se lo digo) Descalzos
Yo do tou ni La espalda desnuda
Pendan youn ap palé Mientras uno hablaba
Youn tapé kouté El otro escuchaba
yo pat fai brui Hablaban tan bajito
Yon van nan kan nan El viento de la caña
Kouri efacé… Se apresuraba
Éfacé sa yo tapé di En borrar lo que se decían
Youn di: Cousin Uno dijo: Primo
Mwin sot fété Haiti Regreso de festejar en Haití
Min yon comisión Aquí te tengo un mensaje
Madam ou voyé pou ou Que te mando tu mujer
Li di Cousin, Cousin Dijo: primo, primo
Li leu pou tounin Es ya hora de regresar
Li di Cousin, ( li di Cousin) Dijo primo, primo
Leu wa jambé lakay Cuando cruzaras a casa
Mim si ou pa pot anyin Aunque no tengas nada que llevar
Wa pa kité manchet ou deye Que no deje atrás tu machete
Cousin, cousin cousin Primo, primo, primo
Wa poté manchet, Llévate el machete,
Wa poté manchet Llévate el machete,
Wa poté manchet…… Llévate el machete,
…pou koupé bawayon Para cortar “bawayon”
Pou koupé kandelab Para cortar candelabro
…pou koupé bawayon Para cortar “bawayon”
Pou koupé kandelab…. Para cortar candelabro
Cousin, cousin, cousin. Primo, primo, primo.
Amigos(as), quisiera entonces que Ustedes tomasen un poco de su tiempo para escuchar esta canción con mucha atención. Es una interpretación magistral que nos ofrece la diva haitiana Emeline Michel. A los que no tienen una conexión Internet muy rápida, les sugiero dejar que la canción baje totalmente y que luego, devuelva el cursor para escuchar la canción sin interrupciones. Es la mejor forma para apreciarla.
Detrás de una letra aparentemente sencilla, se esconde una profundidad de sentimientos, una sensibilidad desbordante por lo que una traducción literal no basta. Hace falta además explicar la canción ya que cada idioma, cada cultura, transmite obviamente sus emociones de una forma diferente y en el caso del “créole”, -un idioma nacido en el dolor de la esclavitud, un idioma inventado como instrumento de lucha y de libertad-, los sentimientos, los cuentos, los refranes comprueban una gran imaginación creativa.
De mi parte, cada vez que escucho esta canción, descubro algo nuevo. Esa es de estas canciones que no mueren, pues no son simples canciones de una moda pasajera. Es un verdadero tesoro para todos los tiempos.
Así que, veamos lo que Emeline nos quiso transmitir:
En un campo de caña
Por Higuey
En Dominicana
Hay dos haitianos
Sentados en un batey
(Te lo digo) Descalzos
La espalda desnuda
Mientras uno hablaba
El otro escuchaba
( Te lo digo) Hablaban tan bajito
Que solo el viento en la caña podía escuchar,
Escuchar lo que decían
El lugar es un batey de Higuey. Los dos haitianos, cortadores de caña descalzos, la espalda desnuda nos sugieren las precariedades del sitio. Pero el lugar es aun más triste que ya por costumbre, hablen muy bajito como si fuese en un cementerio.
La tristeza permanente que les rodea influye sobre sus reflejos y el solo testigo de sus sufrimientos y de sus conversaciones en este batey amargo es precisamente la caña.
Seguimos con el texto:
Uno dijo: Primo
-Voy a festejar en Haití
-Aquí esta un encargo
Lo entregaras a mi mujer de mi parte
Dijo Primo, Primo
Son algunos diez pesos
Dijo Primo, Primo
Cuando cruzaras a casa
Si encuentras a mi mujer con otro
Los entregaras a mi madre
Uno dice al otro que va a “festejar” en Haití. En realidad, hay que entenderlo en el sentido de la alegría de un inmigrante cuando tiene la oportunidad de volver a casa a visitar a sus familiares y amigos. Se trata de nostalgia y de la alegría que uno siente cuando vuelve a ver su calle, su casa, su barrio en fin, la tierra donde nació…Todos aquellos que han vivido en el extranjero como inmigrante entienden esta sensación, ese pellizco en el corazón que hablo.
Entonces, el que se queda en el batey, le da al otro, el encargo de unos diez pesos con la siguiente recomendación: que si su mujer ya esta con otro hombre, que entonces, entregara los “diez pesos” a su madre.
Allí cabe profundizar unos conceptos importantes. Emeline nos sugiere aquí que el cortador del batey no tiene ningún medio de comunicación con su familia cercana. Desde que viajó, no ha sabido de su mujer, pues el arduo trabajo, se lo impide. No sabe si su mujer se cansó de esperar y que se fue a vivir ya con otro. Le manda unos diez pesos dejando la segunda alternativa para su madre pues a pesar del trabajo esclavizante, no le alcanza para las dos. Los diez pesos irán a una o a la otra.
Es bueno notar aquí el uso de los “diez pesos” en idioma español. Después de tanto tiempo en Rep Dom, los haitianos van mezclando los idiomas. Igual lo hacen los dominican-york o los neyorican (que mezclan ingles y español). Algunas veces, esa mezcla de español y créole producen unas combinaciones hilarantes.
Luego Emeline nos dice:
Primo fue, primo volvió
Con una noticia que destroza el corazón
Tu madre murió, (murió) hace ya algunos años
Algunos dicen que fue por la tristeza
Tu mujer esta allí, allí
Aguantando
Los niños están mal
El primero creció, creció
Como un caballo
Y el último, siquiera
Siquiera se recuerda de su padre
El primo vuelve y le cuenta que su madre murió hace ya muchos años. Murió de pena, de tristeza de no poder verlo. Aquí pues, es una madre vencida por el dolor de tantos años de espera sin tener noticias del fruto de sus entrañas. Sus fuerzas pues la abandonaron y la vida de esta madre dolorida ya no tenía sabor ni razón de ser.
Si bien “Primo” es la traducción literal de “Cousin”, aquí más bien, hay que entenderlo en el sentido de compañero de infortunios. Le dice también que los hijos están en condiciones muy difíciles y que el ultimo obviamente no se recuerda de su padre pues a pena había nacido cuando el se fue. Entonces son dos tragedias en vez de una: La madre agonizó en la tristeza y el hijo sobrevive en una difícil condición de pobreza monoparental y deshumanizante.
Uno dijo: Primo
Regreso de festejar en Haití
Aquí te tengo un mensaje
Que te mando tu mujer
Dijo primo, primo
Es ya hora de regresar
Dijo primo, primo
Cuando cruzaras a casa
Aunque no tengas nada que llevar
Que no deje atrás tu machete
Ahora, en el párrafo anterior, llegamos a esta parte de la canción que encuentro aun mas esplendida, aun más fuerte, aun más hermosa. Observamos que a pesar de la duda de haber perdido su esposa, esta última, que esta conociendo una miseria económica enorme en Haití se mantuvo fiel y esperando el regreso de su marido. Esta dura realidad que conoce la mujer pobre haitiana es muchas veces desgarradora. Se dice que son el pilar de la económica rural haitiana y así es. Ella encuentra pues la fuerza y el orgullo para mandar a decir a su compañero que aun que sea con las manos vacías, sin dinero, sin nada, que ya era hora de regresar y que sobre todo, pase lo que pase, que no se avisara en dejar atrás su machete.
La fuerza con la cual Emeline dice la palabra “manchette” en la canción tiene un gran significado. El machete del campesino es su única herramienta de trabajo, es su vida, es todo y si lo déjese allá, estaría pues condenado a una peor vida aun. El machete del campesino es el símbolo del orgullo de poder trabajar y de poder producir el sostén de su mujer y de su familia. Para hacer un paralelo, seria como la motora de un “motoconchista”. Intenta quitarle una moto a un motoconchista y comprenderás.
Primo, primo, primo
Llevate el machete,
Llevate el machete,
Llevate el machete,
Para cortar “bawayon”
Para cortar candelabro
Para cortar “bawayon”
Para cortar candelabro
Finalmente, la esposa le dice aun más. Aunque el machete sirviese a cortar candelabro o “bayawon” (que es una mata espinosa de los terrenos secos), que la traiga. Emeline evoca aquí la dureza de los terrenos desforestados en los campos haitianos, en donde hay matas que siquiera son útiles para comer. Al utilizar la figura de los candelabros y de los “bawayon” , Emeline nos quiere decir que aunque la vida sea durisisima, el orgullo de la esposa prevalece y solicita al esposo que es tiempo ya de regresar a casa.
Una canción espectacular pues que nos permite palpar las múltiples y facetas de la vida de los inmigrantes y para ir descubriendo y entendiendo los sentimientos, las angustias, las ansiedades, los traumas de aquellos a quienes la vida ha reservado una terrible suerte. Una canción magistral que nos recuerda que los trabajadores de los bateyes, no son piedras…Son seres humanos dignos, orgullosos, de carne y de sangre, de sentimientos, de lagrimas, quienes tienen también sus sueños que algún día esperan alcanzar.
Detrás de una letra aparentemente sencilla, se esconde una profundidad de sentimientos, una sensibilidad desbordante por lo que una traducción literal no basta. Hace falta además explicar la canción ya que cada idioma, cada cultura, transmite obviamente sus emociones de una forma diferente y en el caso del “créole”, -un idioma nacido en el dolor de la esclavitud, un idioma inventado como instrumento de lucha y de libertad-, los sentimientos, los cuentos, los refranes comprueban una gran imaginación creativa.
De mi parte, cada vez que escucho esta canción, descubro algo nuevo. Esa es de estas canciones que no mueren, pues no son simples canciones de una moda pasajera. Es un verdadero tesoro para todos los tiempos.
Así que, veamos lo que Emeline nos quiso transmitir:
En un campo de caña
Por Higuey
En Dominicana
Hay dos haitianos
Sentados en un batey
(Te lo digo) Descalzos
La espalda desnuda
Mientras uno hablaba
El otro escuchaba
( Te lo digo) Hablaban tan bajito
Que solo el viento en la caña podía escuchar,
Escuchar lo que decían
El lugar es un batey de Higuey. Los dos haitianos, cortadores de caña descalzos, la espalda desnuda nos sugieren las precariedades del sitio. Pero el lugar es aun más triste que ya por costumbre, hablen muy bajito como si fuese en un cementerio.
La tristeza permanente que les rodea influye sobre sus reflejos y el solo testigo de sus sufrimientos y de sus conversaciones en este batey amargo es precisamente la caña.
Seguimos con el texto:
Uno dijo: Primo
-Voy a festejar en Haití
-Aquí esta un encargo
Lo entregaras a mi mujer de mi parte
Dijo Primo, Primo
Son algunos diez pesos
Dijo Primo, Primo
Cuando cruzaras a casa
Si encuentras a mi mujer con otro
Los entregaras a mi madre
Uno dice al otro que va a “festejar” en Haití. En realidad, hay que entenderlo en el sentido de la alegría de un inmigrante cuando tiene la oportunidad de volver a casa a visitar a sus familiares y amigos. Se trata de nostalgia y de la alegría que uno siente cuando vuelve a ver su calle, su casa, su barrio en fin, la tierra donde nació…Todos aquellos que han vivido en el extranjero como inmigrante entienden esta sensación, ese pellizco en el corazón que hablo.
Entonces, el que se queda en el batey, le da al otro, el encargo de unos diez pesos con la siguiente recomendación: que si su mujer ya esta con otro hombre, que entonces, entregara los “diez pesos” a su madre.
Allí cabe profundizar unos conceptos importantes. Emeline nos sugiere aquí que el cortador del batey no tiene ningún medio de comunicación con su familia cercana. Desde que viajó, no ha sabido de su mujer, pues el arduo trabajo, se lo impide. No sabe si su mujer se cansó de esperar y que se fue a vivir ya con otro. Le manda unos diez pesos dejando la segunda alternativa para su madre pues a pesar del trabajo esclavizante, no le alcanza para las dos. Los diez pesos irán a una o a la otra.
Es bueno notar aquí el uso de los “diez pesos” en idioma español. Después de tanto tiempo en Rep Dom, los haitianos van mezclando los idiomas. Igual lo hacen los dominican-york o los neyorican (que mezclan ingles y español). Algunas veces, esa mezcla de español y créole producen unas combinaciones hilarantes.
Luego Emeline nos dice:
Primo fue, primo volvió
Con una noticia que destroza el corazón
Tu madre murió, (murió) hace ya algunos años
Algunos dicen que fue por la tristeza
Tu mujer esta allí, allí
Aguantando
Los niños están mal
El primero creció, creció
Como un caballo
Y el último, siquiera
Siquiera se recuerda de su padre
El primo vuelve y le cuenta que su madre murió hace ya muchos años. Murió de pena, de tristeza de no poder verlo. Aquí pues, es una madre vencida por el dolor de tantos años de espera sin tener noticias del fruto de sus entrañas. Sus fuerzas pues la abandonaron y la vida de esta madre dolorida ya no tenía sabor ni razón de ser.
Si bien “Primo” es la traducción literal de “Cousin”, aquí más bien, hay que entenderlo en el sentido de compañero de infortunios. Le dice también que los hijos están en condiciones muy difíciles y que el ultimo obviamente no se recuerda de su padre pues a pena había nacido cuando el se fue. Entonces son dos tragedias en vez de una: La madre agonizó en la tristeza y el hijo sobrevive en una difícil condición de pobreza monoparental y deshumanizante.
Uno dijo: Primo
Regreso de festejar en Haití
Aquí te tengo un mensaje
Que te mando tu mujer
Dijo primo, primo
Es ya hora de regresar
Dijo primo, primo
Cuando cruzaras a casa
Aunque no tengas nada que llevar
Que no deje atrás tu machete
Ahora, en el párrafo anterior, llegamos a esta parte de la canción que encuentro aun mas esplendida, aun más fuerte, aun más hermosa. Observamos que a pesar de la duda de haber perdido su esposa, esta última, que esta conociendo una miseria económica enorme en Haití se mantuvo fiel y esperando el regreso de su marido. Esta dura realidad que conoce la mujer pobre haitiana es muchas veces desgarradora. Se dice que son el pilar de la económica rural haitiana y así es. Ella encuentra pues la fuerza y el orgullo para mandar a decir a su compañero que aun que sea con las manos vacías, sin dinero, sin nada, que ya era hora de regresar y que sobre todo, pase lo que pase, que no se avisara en dejar atrás su machete.
La fuerza con la cual Emeline dice la palabra “manchette” en la canción tiene un gran significado. El machete del campesino es su única herramienta de trabajo, es su vida, es todo y si lo déjese allá, estaría pues condenado a una peor vida aun. El machete del campesino es el símbolo del orgullo de poder trabajar y de poder producir el sostén de su mujer y de su familia. Para hacer un paralelo, seria como la motora de un “motoconchista”. Intenta quitarle una moto a un motoconchista y comprenderás.
Primo, primo, primo
Llevate el machete,
Llevate el machete,
Llevate el machete,
Para cortar “bawayon”
Para cortar candelabro
Para cortar “bawayon”
Para cortar candelabro
Finalmente, la esposa le dice aun más. Aunque el machete sirviese a cortar candelabro o “bayawon” (que es una mata espinosa de los terrenos secos), que la traiga. Emeline evoca aquí la dureza de los terrenos desforestados en los campos haitianos, en donde hay matas que siquiera son útiles para comer. Al utilizar la figura de los candelabros y de los “bawayon” , Emeline nos quiere decir que aunque la vida sea durisisima, el orgullo de la esposa prevalece y solicita al esposo que es tiempo ya de regresar a casa.
Una canción espectacular pues que nos permite palpar las múltiples y facetas de la vida de los inmigrantes y para ir descubriendo y entendiendo los sentimientos, las angustias, las ansiedades, los traumas de aquellos a quienes la vida ha reservado una terrible suerte. Una canción magistral que nos recuerda que los trabajadores de los bateyes, no son piedras…Son seres humanos dignos, orgullosos, de carne y de sangre, de sentimientos, de lagrimas, quienes tienen también sus sueños que algún día esperan alcanzar.
2 comentarios:
Qué hermoso!
Qué hermosa la sensibilidad de Emeline!
Qué hermoso el sentimiento que le imprimes a la descripción de la canción, para que los que no estamos allá, en Haití o en República Dominicana, sepamos lo que tú y Emeline ya saben...
Un abrazo, Nora
Gracias Nora...Sé que estas contenta hoy pues ganó Argentina.
Un abrazote desde Haití.
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