Acá amigos y amigas, un reportaje de Le Nouvelliste con relación al Carnaval de Haití 2007
En una entrevista exclusiva concedida al “Le Nouvelliste”, el titular de la Secretaria de Cultura había anunciado innovaciones al carnaval 2007. Estos últimos fueron visibles. El éxito más notable de estas festividades populares se refiere a toda la gama de los colores en torno al tema principal.
Desde mega publicidades como la de una marca de whisky que orneaba el edificio de Air France, hasta las obras decorativas de los estudiantes del ENARTS (Escuela de Artes), la concepción de los tanques alegóricos y las coreografías de los grupos a pie, las variaciones cromáticas hicieron sacar la capital de la grisalla y la morosidad del contexto económico y político.
En un espacio que transformó en lugares públicos con árboles y monumentos, el arquitecto quien se ha convertido en Ministro Daniel Elie quiso experimentar su visión estética con la puesta en escena de más de un millón de ciudadanos que se desplazaron cada día. Estos últimos parecían esperar una consigna para canalizar hacia arriba su energía positiva. En espera de iniciativas de otros sectores de Estado, el Ministro de Cultura se reveló el primer alquimista del programa de apaciguamiento social.
Las decoraciones fueron fabulosas. Incluso la Torre 2004 aun inacabada recibió generosamente los colores pastel de largas banderolas. No es una casualidad que este experto del espacio urbano que es el arquitecto Daniel Elie haya elegido establecer la caseta del Ministerio de Cultura en la parte baja de la torre, aún hoy, objeta de una gran controversia... Pero, la Secretaria de Cultura no está solo en el empleo de este lugar abandonado desde los acontecimientos de 2004. Es acompañado por la radio y tele del AMIH (Asociación de los medios de comunicacíon independientes haitianos) que agrupa Radio Solidaridad, Tropic Fm, Mega Fm, Radio Tele Guinen, Radio Indígena, Melodía Fm, Canal 11... La caseta del Ministerio de Cultura se impuso en un decorado futurista con figuras dinámicas próximas a los pintores Giacomo Balla y Umberto Boccione. La caseta del AMIH, más modesta, estaba cubierta con páginas de Diarios. La proximidad de estas dos casetas llamó la atención de los observadores perspicaces. Se colocaba a los trabajadores de la prensa independiente y los administradores de la Cultura al buen lugar para ver en el concreto espectáculo "lasigwav de" imaginado en 1975 por Jean Claude Garoute. El encanto del animal mítico jugó hasta el Palacio nacional a las paredes decoradas de máscaras y de dos inmensos fotos de Tiga.
El reportaje de Le Nouvelliste este año quiere concentrarse más específicamente en la expresión de la cultura tradicional del carnaval (los tanques alegóricos, grupos a pie, símbolos...) Esto se coloca en una voluntad de hacer hincapié en los esfuerzos desplegados para dar a la fiesta anual un nuevo aspecto estético. En la perspectiva de un producto turístico destinado a imponerse en el mercado internacional, haremos hincapié en los nuevos acervos, las faltas, los espacios que deben colmarse, las casetas. Pero también sobre la desconcentración del carnaval que, en una capital superpoblada, no puede ya tener como centro de interés el Champ-de-Mars.
En una entrevista exclusiva concedida al “Le Nouvelliste”, el titular de la Secretaria de Cultura había anunciado innovaciones al carnaval 2007. Estos últimos fueron visibles. El éxito más notable de estas festividades populares se refiere a toda la gama de los colores en torno al tema principal.
Desde mega publicidades como la de una marca de whisky que orneaba el edificio de Air France, hasta las obras decorativas de los estudiantes del ENARTS (Escuela de Artes), la concepción de los tanques alegóricos y las coreografías de los grupos a pie, las variaciones cromáticas hicieron sacar la capital de la grisalla y la morosidad del contexto económico y político.
En un espacio que transformó en lugares públicos con árboles y monumentos, el arquitecto quien se ha convertido en Ministro Daniel Elie quiso experimentar su visión estética con la puesta en escena de más de un millón de ciudadanos que se desplazaron cada día. Estos últimos parecían esperar una consigna para canalizar hacia arriba su energía positiva. En espera de iniciativas de otros sectores de Estado, el Ministro de Cultura se reveló el primer alquimista del programa de apaciguamiento social.
Las decoraciones fueron fabulosas. Incluso la Torre 2004 aun inacabada recibió generosamente los colores pastel de largas banderolas. No es una casualidad que este experto del espacio urbano que es el arquitecto Daniel Elie haya elegido establecer la caseta del Ministerio de Cultura en la parte baja de la torre, aún hoy, objeta de una gran controversia... Pero, la Secretaria de Cultura no está solo en el empleo de este lugar abandonado desde los acontecimientos de 2004. Es acompañado por la radio y tele del AMIH (Asociación de los medios de comunicacíon independientes haitianos) que agrupa Radio Solidaridad, Tropic Fm, Mega Fm, Radio Tele Guinen, Radio Indígena, Melodía Fm, Canal 11... La caseta del Ministerio de Cultura se impuso en un decorado futurista con figuras dinámicas próximas a los pintores Giacomo Balla y Umberto Boccione. La caseta del AMIH, más modesta, estaba cubierta con páginas de Diarios. La proximidad de estas dos casetas llamó la atención de los observadores perspicaces. Se colocaba a los trabajadores de la prensa independiente y los administradores de la Cultura al buen lugar para ver en el concreto espectáculo "lasigwav de" imaginado en 1975 por Jean Claude Garoute. El encanto del animal mítico jugó hasta el Palacio nacional a las paredes decoradas de máscaras y de dos inmensos fotos de Tiga.
El reportaje de Le Nouvelliste este año quiere concentrarse más específicamente en la expresión de la cultura tradicional del carnaval (los tanques alegóricos, grupos a pie, símbolos...) Esto se coloca en una voluntad de hacer hincapié en los esfuerzos desplegados para dar a la fiesta anual un nuevo aspecto estético. En la perspectiva de un producto turístico destinado a imponerse en el mercado internacional, haremos hincapié en los nuevos acervos, las faltas, los espacios que deben colmarse, las casetas. Pero también sobre la desconcentración del carnaval que, en una capital superpoblada, no puede ya tener como centro de interés el Champ-de-Mars.