Gracias querido Padre por haberme amado, cuidado, asistido, educado...
Hoy me haces falta, me haces mucho falta, pero puedes estar seguro que todos los nobles ideales que me inculcaste permanecerán siempre en lo más profundo de mi alma y en lo más hondo de mi corazón.
Hoy, ya, no estas con nosotros físicamente pero tu voz, tus consejos, tu sonrisa, tu risa, tus conocimientos, tus sueños, tus deseos, tu obra literaria, todo se ha quedado intacto y es parte de mi vida, de nuestra vida...es parte de esta familia que has querido tanto y que tanto aprendió de ti...
Aquí publico tu última foto, tu último aniversario y a ti, dedico este blog.
Padre, te quiero y te extraño.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario